Solsticio de Verano
En un extraño mundo cambiante, cada vez queda menos espacio para los viejos ritos, las viejas creencias.Pero hay unos días en el año, que el pasado atávico recupera toda su fuerza, y los ritos antiguos rasgan el velo del olvido y se hacen presentes.
El Solsticio de verano es uno de esos días. Este día mágico, obviamente ahora en el hemisferio norte, es un momento extraordinario de renovación. Purificación a través del poder del sol, fuego arrancado por un renacido Prometeo. El fuego lava, engendra nueva vida, fertiliza la tierra y la dota de nueva energía.


De uno de los pinos selecionados, por su porte y su diámetro, surgirá "El Far" (El Faro), la guía para los cazadores en la noche oscura, su ovillo de Ariadna. Se necesitan varios leñadores para cortar, pelar y rajar el tronco, arrastrarlo una vez colocadas todas las cuñas y "plantarlo" en medio de la plaza del pueblo.
Suele estar ahí, durante varias semanas, anuncio de lo que va a acontecer, erguido, imponente, exhibiendo al sol su porte esbelto, sus herídas, sangrantes de resina.
Luego están la "Teias" (algo así como "Antorcha" en traducción un poco libre), de tamaño según la capacidad del portador.

La tarde del día 23 de Junio todo está a punto. Los porteadores parten hacia el monte, bastón en mano, una bolsa a la espalda, ropa cómoda y el espíritu elevado, satisfecho el ánimo, caliente el hígado, a veces sospechosamente caliente, como delata su aliento.

Al atardecer, el pueblo se arremolina en la plaza. Conforme la oscuridad avanza, en este el día más largo, el nerviosismo se hace más patente hasta el momento culminante.

En el monte, como respuesta, se encienden las piras. Al turno, cada nuevo Prometeo recoge su teia, la carga al hombro, y a la señal, enfila el sendero de regreso al pueblo. En cuestión de minutos, el fuego, como una gran serpiente, desciende de la montaña, sobre los hombros, zigzagueante.
La serpiente se alarga, largos minutos corren despacio, al ritmo de los pies de los portadores.

Una vez más, el pueblo renace, como Fenix, y renueva su vínculo.
Que el poder del fuego lave sus pecados, fertilice sus campos, le de buenas cosechas.

Mi viaje nunca acaba.....